EL CUIDADOR



La vida del cuidador/a cambia a raíz del diagnóstico de la enfermedad en su familiar. De la incredulidad se pasa en unos casos a la resignación y, en otros, a la desesperación por intentar organizar la vida de la persona enferma lo más rápidamente posible. Su nueva responsabilidad induce una profunda transformación de su forma y calidad de vida, ya que nadie está preparado para vivir 24 horas al día con una persona que cada día va necesitando una mayor asistencia, siendo testigo del progresivo deterioro de su familiar.

Os dejamos un vídeo del Profesor Graham Stokes hablando de los factores que se deben tener en cuenta para el cuidador de personas con demencia que quieran permanecer en casa y de como entender sus necesidades básicas.